Sopa de letras (o SDL)

29.4.08 18 Comments

Hoy, en Chile, tenemos paro de la salud. No es que repentinamente todos nos vayamos a enfermar porque la salud se declara en huelga, sino que el gremio de la salud –o los gremios, en estricto rigor –decidieron paralizar sus labores en demanda de mejores condiciones laborales.

Lo curioso no es que vayan a paro, algo que ya es relativamente habitual en este y otros gremios, como los contratistas de CODELCO (Corporación Nacional del Cobre), sino las entidades que convocan al paro: la CONFENATS (Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud), la FENETSS (Federación Nacional de Asociaciones de Funcionarios Técnicos de los Servicios de Salud) y la FENPRUSS (Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud). Parece broma, pero no lo es. Estas impresionantes siglas son reales, y agrupan a los funcionarios de la salud. Aunque a mi juicio, la FENETSS debería agrupar, por ejemplo, a los gastroenterólogos, o al menos a los pacientes con problemas de gases. Pero no, agrupa a los funcionarios técnicos.

Hay que agradecer, al menos esta vez, que no se haya plegado al paro la CONFUSAM (Confederación Nacional de Funcionarios de la Salud Municipalizada), ya que una organización con ese nombre obviamente sólo puede tener como fin confundir, y no es lo que se necesita en este momento.

En fin, para deleite de todos quienes insisten en llamarme SQNA o siglas por el estilo, aquí vamos con una breve pero contundente recopilación de siglas, porque en este país las siglas pareciera que dan estatus. Mis agradecimientos a Lilí Illanes, lectora que me propuso el tema y gran parte de las siglas aquí expuestas.

Primero, vamos con las televisivas:

SQP, CQC, MQH. Detestables programas de televisión dedicados a la farándula, que creen ser mejores –o pasables, al menos –por el hecho de usar una sigla como abreviación del nombre. Así, Sálvese quien pueda, Caiga quien caiga y Mira quien habla se han abreviado a 3 letras, lo que supuestamente los haría más soportables, pese a la basura de sus contenidos. Sí claro. Idiotas y la CDSM (Concha de su madre), y la PQLP (Puta que los parió). Disculpen ustedes el exabrupto, pero es que no hay derecho. ¡Ah!, se me arrancaba uno. MCC, Morandé con Compañía. Ése se salva por razones evidentes.

Los depresivos:

DIPRES. Dirección de Presupuesto. Está bien que algunos años el presupuesto sea exiguo. Que no alcance para todo lo que se quiera hacer. Pero, ¿DIPRES? Es como demasiado depresivo, ¿no? Ahora, con la bonanza del cobre, deberían cambiarlo por algo más alegre, más optimista. No digo que lleguemos a siglas como YUPI o HURRA, pero algo neutro, al menos.

LACRIM. Laboratorio de Criminalística. Claro, dan ganas de llorar de sólo escuchar el nombre. Me imagino a todos los efectivos llorando por los pasillos. Lo dejo aquí porque ya volveré sobre las siglas de la Policía de Investigaciones.

Los orientales.

Los seremis (Secretarios Regionales Ministeriales), que vaya a saber uno por qué, van con minúsculas. Parientes cercanos de los samuráis, claramente.
La JUNJI (Junta Nacional de Jardines Infantiles). Más japonés imposible.

Los gubernamentales

El gobierno, a estas alturas, parece ser poco más que una agrupación de siglas. La ya citada DIPRES, los seremis y la JUNJI dependen del Gobierno. Pero hay más. Ahora les ha dado por transformar en siglas los ministerios. Hablar, por ejemplo, del MINSAL para referirse al Ministerio de Salud, de MIDEPLAN para el Ministerio de Planificación (que nunca he entendido a qué se dedica, si en este país la planificación no existe ni de nombre) o de MINEDUC para hablar de la cartera de Educación. Ya nadie se refiere al Ministerio de Vivienda, sino al MINVU (Ministerio de Vivienda y Urbanismo). Todo esto me parece de una imbecilidad sin límites. Pero en esto de los ministerios, el peor que me ha tocado oír es el de MINTRATEL, para referirse al Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones. Claro, el nombre completo es un poco largo, pero la sigla es más complicada todavía. Y si seguimos en el gobierno, tenemos la SECPRES (Secretaría de la Presidencia), la CONADI (Corporación Nacional de Desarrollo Indígena) y el SERVIU (Servicio de Vivienda y Urbanismo), que evidentemente no sirvió.

Las de las Fuerzas Armadas y de Orden

Partiendo de la base que lo de “Fuerzas Armadas” ya no corre (lo correcto son las FF.AA.), aquí encontramos siglas notables:

DIPRECA. Dirección de Previsión de Carabineros. Sofisticada sigla, por decir lo menos. Pero ya a nadie le extraña cuando se habla del Hospital Dipreca. Pero haga la prueba de escribirlo en un editor de textos con autocorreción, y verá como permanentemente le aprece “depreca”. Que viene a ser algo como “ruega”.

CESIM. Centro de Estudios e Investigaciones Militares.

ACAPOMIL. No se trata de un grito de vendedor ambulante ni de una tienda de ésas que venden todo al mismo precio, sino de la Academia Politécnica Militar.

ACAGUE. Una fineza de sigla, para referirse a la Academia de Guerra. Sí, ya sé. Yo también creí que era broma. Pero vaya a http://www.acague.cl/ y véalo usted mismo.

La Policía de Investigaciones

Con Investigaciones pasa algo curioso. TODO debe expresarse en siglas. Con eso caen en complicaciones increíbles, que sufren quienes deben pronunciar lo impronunciable. Es cosa de ver a un periodista de policiales haciendo un despacho cuando más de una brigada de Investigaciones está implicada. Es un verdadero trabalenguas. Vamos.
Partiendo por lo más simple, está la Brigada de Homicidios, con un desabrido BH. Podrían haber sido un poco más creativos y denominarse BRIHOM, más acorde a las políticas institucionales.
Por ejemplo, la JENADEC (Jefatura Nacional de Delitos Económicos) investiga, obviamente, los delitos de esa índole. De ella depende la BRICIB (Brigada Investigadora del Ciber Crimen). Caso aparte son la BRICO (Brigada Investigadora del Crimen Organizado), el DISUQ (Departamento de Investigación de Sustancias Químicas), la BIRO (Brigada Investigadora de Robos) y la JENAFAM (Jefatura Nacional de Delitos contra la Familia).

Como si todo lo anterior no bastara, la policía tiene a la BRISEXME (Brigada investigadora de Delitos Sexuales y Menores Metropolitana), que en estricto rigor debería ser la BRISEXMEME, pero era mucho. También la BRIDEC (Brigada de Delitos Económicos), la BRILAC, que contra todo lo que pueda parecer, no investiga los delitos lácteos ni los crímenes contra el yogurt, sino el lavado de dinero (Brigada Investigadora de Lavados de Activos). Seguimos con la BRIDERPO (de Delitos Portuarios) y la BRIDEPI (Delitos de Propiedad Intelectual).

Y esos son sólo ejemplos, porque hay más. Si no los pongo es sólo para no parecerme a un sitio amigo dando la lata. Pero ¿se imaginan cuando se llaman por teléfono?

-Briderpo, buenos días.
-Sí, buenos días, lo llamo de aquí de la Bricrib.
-Ajá. ¿Dependencia de la Jenadec, no?
-Afirmativo.
-¿Con quién quiere hablar?
-Con el subinspector Vallejos.
-Negativo. Sírvase llamar a MCC.
-Copiado. Cambio y fuera.

Por último, una anécdota personal. Estaba yo con un amigo cotizando el servicio de envío de un libro al extranjero. Llamamos por teléfono a una empresa, en la que la telefonista, amablemente, procedió a dar la información. Nos dio un precio determinado, correspondiente a un PPI. Y bueno, el precio del PPI es tal, y se demora tanto, porque el manejo del PPI tiene determinadas características... Los ojos de mi amigo –al teléfono –se abrían cada vez más. Hasta que lo escuchamos preguntar, luego de larga conversación, qué diantre era PPI. “Pequeño Paquete Internacional”, le contestaron al otro lado de la línea, con tono de “imbécil, cómo no sabes lo que es un PPI”. Los ojos abiertos por la cantidad de información se llenaron de lágrimas de risa, y la conversación no pudo seguir, como era de esperar.

Quedan fuera miles –de verdad miles, no es por decir “muchas” –siglas, muchas de ellas de uso tan diario que ya ni se consideran siglas. El IMACEC, el IVA, la UF, la UTM, el IPC, todas las siglas municipales, incluyendo la SECPLAC, el Servicio Nacional de Geología y Minería, SERNAGEOMIN, la ISAPRE, FONASA, las AFP, el cuasi sillón de siquiatra que es la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM) y muchos más. Y no estoy contando las siglas con las que tenemos que tratar en el computador, porque eso ya sería un exceso.
Y usted, estimada, estimado, ¿tiene experiencia con las siglas?